4.2. Publicar, una declaración de intenciones
4.2.2. La publicación expandida en el arte
En el momento en el que el formato se expande, también lo hacen sus engranajes, es decir, cada una de las partes desplegadas. Así, la experiencia se amplía, se conectan entre sí distintas activaciones y, a su vez, también se producen derivas que pueden desembocar en nuevos proyectos y colaboraciones. Ya no solo hablamos de las publicaciones en tanto que obra de arte, sino también de publicaciones que forman parte de procesos de creación complejos y que acaban generando un engranaje de piezas multiformato en su producción y presentación. Vamos a ver este fenómeno con casos concretos.
Un buen ejemplo de este fenómeno sería la obra Investigations, del artista suizo Christian Marclay. Se trata de una performance de tipo site-specific que el artista ha organizado en distintas ciudades del mundo, colaborando en cada lugar con pianistas locales que aportan su conocimiento, interpretación e investigación particulares, lo que da lugar siempre a resultados diferentes. La ejecución de esta pieza está basada en una publicación sui generis en forma de partituras gráficas variables que son ejecutadas en un concierto con varios pianos tocados a la vez.
En un primer momento, Marclay se dedicó a buscar fotografías en las que apareciesen manos tocando un piano. Algunas de las fotos que encontró y recortó mostraban dos manos derechas, o tres o cuatro manos que indicaban que el piano estaba siendo tocado por varias personas a la vez. Cuando tuvo una selección de cien fotografías, compuso una por cada página individual, incluyendo fragmentos de pentagramas en blanco debajo de cada foto. Este conjunto de cien fichas o partituras, contenidas en una caja, fue entregado a un primer grupo de pianistas, quienes debían anotar su propia interpretación de cada imagen traducida a notación musical. La inclusión de imágenes en las que salían varias personas tocando instaba, a su vez, a que en la posterior ejecución de la pieza sonora los pianistas se ayudasen entre ellos a tocar esa parte en concreto. Además, también se incluyen en la interpretación gestos como apoyarse en el piano, tocar desde el suelo y otros gestos corporales que confieren a la performance una relación corporal, además de visual, con el sonido. Antes de cada performance, las cien partituras previamente anotadas por cada músico se mezclan, como si fuese una baraja de cartas, y la acción dura hasta que todos los músicos hayan terminado de interpretar todas las páginas.
Cada vez que la performance tiene lugar, se imprimen e intervienen un nuevo conjunto de publicaciones, que van lugar por tanto a variaciones de esta, que van expandiendo y diversificando un mismo contenido de base. Las distintas variaciones de esta publicación, con la impronta personal que cada pianista aporta a la interpretación musical de las fotografías, nos llevan a pensar en el carácter mutante y poliédrico que pueden tener las publicaciones. Como vemos, en este caso ya no nos encontramos solamente con que la publicación es la obra en sí misma, sino que la publicación es el elemento que inicia una obra mutante en su forma y tiempos. Así, la publicación es parte esencial del proceso de creación, y puede verse de manera independiente o experimentarse sensorialmente a través de la música escrita que contiene, que a su vez es siempre distinta. Como podemos ver, la cualidad de «expandido» se nos hace del todo necesaria para describir este tipo de proyectos tan contemporáneos.
Otro caso de publicación expandida podría ser la que tuvo lugar durante la feria de arte contemporáneo SWAB, que se celebra anualmente en Barcelona. En 2019 se llevó a cabo un ciclo de performance, organizado por la comisaria Alexandra Laudo, que en su programación incluía la pieza M’has parlat i t’he dit que et vaig dir que no et digui, una colaboración entre el colectivo de realizadores, programadores e investigadores Estampa, y la escritora y artista visual Irene Solà. La pieza parte de un intercambio epistolar vía correo electrónico que se dio entre la escritora y una red neuronal de generación de texto que había sido previamente entrenada por Estampa. La puesta en escena del proyecto, es decir, la performance, consistía en una acción mediada por la intervención de Solà, por un lado, y los miembros de Estampa, por otro. Ambos equipos disponían de un clásico proyector de opacos, en el que alternativamente y en paralelo iban mostrando al público cada carta escrita y su correspondiente contestación, lo que generaba un giro analógico, físico y presencial bastante peculiar que contrastaba con la vía electrónica que había mediado las comunicaciones y con el hecho evidente de que una de las partes comunicantes había sido una máquina. Como parte del proyecto, se editó una publicación sencilla, a una tinta color negro y encuadernada con grapa de tipo omega, que contenía toda la correspondencia mantenida. En este caso, la fase previa de correspondencia, la performance y la publicación son distintas partes de un proceso que por momentos confluye en un mismo lugar y por momentos se despliega con tiempos de lectura y almacenaje sensorial distintos. En última instancia, la publicación es tan solo una de las partes del proceso, pero aquella que eventualmente puede perdurar de manera más estable en el tiempo.
El tercer y último caso que nos gustaría mencionar es algo más panorámico, pues no se trata de un proyecto concreto sino más bien el trabajo continuado de una persona. Es el caso de la diseñadora gráfica e investigadora suiza Loraine Furter, que trabaja en Bruselas desde 2007. Furter tiene una estrecha conexión con el contexto de la publicación y la edición expandida, tanto directamente a través del diseño de contenidos editoriales híbridos, que combinan lo digital con la gráfica impresa, como también a nivel teórico, investigando su contexto, procesos y posibilidades.
Recomendamos fervientemente la lectura del ensayo Expanded Publication que esta diseñadora e investigadora realizó a propósito de la publicación expandida, rindiendo en parte homenaje al ya desaparecido proyecto editorial estadounidense Dot Dot Dot (2000-2010). Lo que resulta muy interesante de la lectura de este texto es que nos sumerge de manera activa en la no linealidad de la lectura, en su expansión y deriva. Una navegación muy contemporánea, que nos abre a su vez ventanas a otros proyectos y publicaciones en sintonía, y nos hace pensar en cómo el propio proceso de elaboración de una publicación puede crear situaciones, acciones y piezas en el medio.