2. Análisis del sector público de las artes visuales en el Estado español

2.1. Museos, centros de arte y salas de exposiciones

2.1.3. Modelos de gestión

En el panorama actual de museos y centros de arte contemporáneo en el Estado español se pueden encontrar diferentes sistemas de gestión interna, tanto en aquellos de dependencia pública como en el ámbito privado.

Los diferentes organismos públicos han generado fórmulas distintas para dotar de autonomía a los centros, como son las agencias estatales, las fundaciones públicas, las empresas públicas, los consorcios, etc. Estas fórmulas de gestión proporcionan agilidad y eficacia en el funcionamiento diario (económico, de personal, de recursos), una mayor independencia en la programación, e incluso facilitan la llegada de acuerdos con otras instituciones o financiadores.

Frente a este sistema, también existe un buen número de centros que dependen orgánicamente o incluso son parte de los departamentos de Cultura de las correspondientes Administraciones públicas, sin personalidad jurídica propia. Como es obvio, estos son más vulnerables y gozan de menor independencia.

Para la correcta gestión de cada institución artística de titularidad pública, de acuerdo con sus fines fundacionales, estos deben contar con tres tipos de recursos que, a pesar de lo obvio, no siempre se dan:

  1. Equipamiento arquitectónico: características físicas, espaciales y tecnológicas adecuadas para cubrir los fines de la institución, así como un mantenimiento acorde.
  2. Equipo: cada institución deberá configurarse sobre tres órganos o estamentos con unas competencias y funciones bien definidas:
    • Patronato: como órgano colegiado de gobierno.
    • Dirección: una persona independiente, seleccionada por concurso público transparente, que firme el proyecto artístico y que disponga de una figura laboral estable en el centro.
    • Equipo técnico: equipo profesional especializado y lo suficientemente amplio para cubrir las demandas de la institución.
  3. Financiación: los presupuestos del Gobierno nacional, autonómico o local deben contemplar una dotación presupuestaria anual suficiente para alcanzar los objetivos del proyecto artístico y garantizar el buen funcionamiento y mantenimiento de la institución, sin tener en cuenta otros recursos públicos o privados que puedan mejorar o aumentar la programación.

Las condiciones descritas anteriormente, que son un reflejo del «Documento de buenas prácticas en museos y centros de arte» ya mencionado, son incumplidas actualmente por un gran número de instituciones públicas, que suelen caer en trabas administrativas de no fácil solución.

Por otra parte, la propuesta para la ampliación del «Documento de buenas prácticas en museos y centros de arte» confirma las necesidades de los últimos años, como son:

  1. Las limitaciones de los contratos de dirección para que no superen los diez años.
  2. La incorporación de la igualdad de género según la Ley Orgánica 3/2007 para la Igualdad Efectiva de Mujeres y Hombres (LOI).
  3. Aplicar el Estatuto del Artista para garantizar los derechos de autoría y retribuir sin excepción su actividad, o garantizar que en ningún caso se podrá externalizar de manera total o parcial la gestión de cualquier museo, centro o sala de titularidad pública al sector privado.