5.1. Introducción
La posibilidad de generación de energía eléctrica a partir del siglo XIX tuvo como consecuencia la fabricación de numerosos aparatos eléctricos que modificarían de forma revolucionaria la forma de vida de las personas. El exponencial desarrollo de la tecnología, sobre todo a partir del siglo XX, influirá de forma significativa en todo el arte contemporáneo hasta nuestros días.
Desde la aparición de la fotografía en torno a 1839, algunos inventos técnicos como la cámara fotográfica, el cine, la televisión, el vídeo, o en las últimas décadas el desarrollo de las tecnologías digitales o de Internet, han posibilitado formas totalmente nuevas de hacer arte.
En Inventar el futuro: arte, electricidad y nuevos medios (2013), Edward A. Shanken realiza una exploración de la historia del arte reciente de la que podemos extraer algunas de las cuestiones fundamentales para analizar los usos artísticos de los medios electrónicos. La hemos resumido en el creciente interés por la luz eléctrica como medio artístico, la representación del movimiento, el espacio interactivo y la virtualidad.